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Revista
Acta Académica

Universidad Autónoma de Centro América

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No usemos computadores[*]

Adolfo Di Mare

Resumen $[\/]$ $[/\]$

Se estudia la barrera que separa al gerente del Computólogo en las empresas e instituciones que necesitan Sistemas de Información Gerencial. Se explica porqué a veces los sistemas no son adecuados, y se delimita grosso modo la responsabilidad de cada profesional, con el fin de aliviar las crisis que en ocasiones se presentan al usar computadores. Se incluye una recomendación para mejorar el curriculum de las carreras universitarias de Computación.

Introducción $[\/]$ $[/\]$

Las computadoras son una herramienta que ha causado un gran impacto en nuestras sociedades. La llamada revolución informática ha permitido lograr increíbles incrementos de productividad en diversas ramas del quehacer humano.

Pero también se han producido una gran cantidad de fracasos en computación. En este escrito deseo identificar algunos de los problemas que surgen al aplicar esta nueva tecnología, para recomendar qué hacer para evitar que estos fracasos no se sigan produciendo.

Aunque puede ocurrir que mis opiniones no sean compartidas por muchos profesionales de la computación, y menos aún por vendedores de equipo, espero que mi reflexión ayude a que mejoremos la forma en que trabajamos, ayudados por ese increíble aparato hecho de silicón.

Dirijo estas palabras al profesional de la Computación y al gerente, que son las dos partes que tienen injerencia en la computarización.

Sistemas de Información Gerencial $[\/]$ $[/\]$

Defino a un SIG (Sistemas de Información Gerencial) como un conjunto de procedimientos que permiten responder cualquier pregunta del gerente (esta definición es muy amplia, pues hasta obliga al encargado del centro de cómputo a predecir el futuro). En la práctica la utilidad de un Sistema de Información depende del usuario del sistema, y la clase de información que cada usuario recibe depende de su nivel dentro de la empresa.

Para usar la terminología clásica de los administradores, hablo de tres niveles de mando en la empresa: el gerencial, en donde están los que no hacen nada pero que sí deciden, el operacional, en donde están lo que todo lo hacen, pero que nada deciden, y el área gris de los mandos medios, donde ni deciden, ni hacen, pues su función primordial es servir de enlace entre los gerentes y los operadores.

El SIG debe producir la información para los tres niveles. Lo usual es que la gerencia haga unas preguntas que son prácticamente incontestables ("¿Cuál es el incremento de la ganancia que se obtendría al cerrar todas las fábricas de Latinoamérica para trasladarlas a Hong Kong y Macao?"). El mando medio está lleno de jóvenes industriosos con MBA's (Master in Business Administration), que son expertos en revolver números con una hoja electrónica de cálculo quienes, al final, producen un informe lleno de gráficos de pastel que indica que hay que irse para Hong Kong pero no a Macao.

Los niveles operacionales de una empresa lo único que obtienen del SIG son unas pantallas prefabricadas con DBase III, las que les permiten digitar los datos cuando un nuevo cliente aparece en la ventanilla a pagar por uno de los servicios que la corporación vende.

Los Sistemas de Información Gerencial son un mito. Afirmo que el SIG fue inventado por lo vendedores de equipo para incrementar sus ventas. Le dijeron a los gerentes que ellos no estaban bien informados, por lo que necesitaban que las computadoras les brindaran toda la información de la que carecían. Por ejemplo, a las corporaciones bananeras les convencieron de que no saber exactamente cuántos bananos pintos de menos de 257 gramos se producían en cada país era una gran tragedia sólo equiparable a la de Hiroshima. Ellos se lo creyeron bajo la excusa de que "si la competencia lo tiene, ¿cómo no voy a tenerlo yo?".

Bajo esta perspectiva, para mantener un SIG es necesario contar con un super-computador que puede responderlo todo. Esta cualidad es, en mi opinión, uno de los más serios defectos del SIG típico, pues ningún sistema humano puede abarcarlo todo. Como decimos coloquialmente, "lo perfecto es enemigo de lo bueno". Sustento esta opinión en las estadísticas recientes, que dicen que las mega-computadoras que vende IBM ya no son negocio, pues la tendencia actual es que cada quien tenga las micro computadoras que necesita.

El síntoma $[\/]$ $[/\]$

Es incontable el número de fracasos y atrasos que ha producido la computarización en las empresas, cuando el objetivo final es implantar un SIG. La tendencia era de "meterlo todo" en el computador. Si hay algún problema, la creencia popular es que al obtener un campito en la máquina informática ésta lo resuelve. Como todos los problemas administrativos son, en última instancia, problemas de información, entonces la máquina procesadora de datos debe ser capaz de resolverlo todo "automáticamente".

Recuerdo que le pedí a un estudiante de una Universidad, en una prueba oral, que me diera un ejemplo de un "Sistema de Información NO Mecanizado". Dijo, después de sudar un poco, que ya no hay sistemas de ese tipo. Olvidó, por supuesto, mi sistema de cheques, el de mi libreta de números telefónicos y el que usa mi Mamá para almacenar las recetas. Hiper-tecnificación unida a des-orientación.

Se ha llegado a creer tanto en las máquinas programables hasta llegar a la creencia infundada de que una secretaria no cometerá errores de redacción y ortografía si cuenta con una máquina de escribir último modelo. Pero, recordemos, no es la máquina de escribir la que escribe la novela, es el escritor quien la redacta.

Las computadoras se prestan mucho para crear mitos principalmente porque se les ha atribuido la cualidad de ser pensadores sintéticos. ¿Quién no ha visto una película en la que el Computador Genial decide que los humanos somos inferiores, y programa un hecatombe que únicamente el héroe musculoso es capaz de evitar?

El problema $[\/]$ $[/\]$

El principal problema al implantar un SIG es la falta de dirección gerencial. Un buen SIG no puede coexistir con un mal gerente, y es muy probable que en donde haya un buen gerente también hay un SIG que funciona.

Recordemos que el gerente, en cualquier empresa, es la persona que administra, controla, y manda. O sea, que todo debe de hacerse como el gerente lo quiere, y cuando no es así tarde o temprano el infractor es removido de la empresa. Si un SIG no se ajusta a las necesidades gerenciales, simplemente deja de existir.

Un buen gerente define la forma en que su empresa debe funcionar. Si no lo hace, entonces serán los empleados de menos nivel quienes decidan por él cómo hacer las cosas, y al final se crearán sistemas de trabajo incompatibles. El paso del tiempo hará cada vez más difícil desenredar la maraña, y llegará el momento en que la "burocracia" se coma a la empresa.

Si el gerente lo permite, al correr del tiempo todo estará dentro del computador. Los computadores todavía son un símbolo de estatus, y muchos empleados esperan que estas máquinas hagan el trabajo por ellos. Sin control gerencial, todos necesitarán cantidades increíbles de poder de cómputo para realizar sus labores. Además, es siempre fácil "echarle la culpa" de cualquier error a cómputo.

En cambio, el buen gerente definirá desde el principio cuál es la forma de funcionar de su empresa. Dará directrices suficientemente completas para evitar que los empleados, dada su visión local de la problemática empresarial, tomen decisiones que afecten adversamente a la empresa.

Para el programador de computadoras, un Sistema de Información Gerencial no tiene ninguna cualidad técnica especial. Desde el punto de vista técnico, es mucho más fácil programar un SIG que un video-juego, y hay muchísimas herramientas disponibles para esto: la última moda son los 4GLs (Fourth Generation Languages), o Lenguajes de Cuarta Generación usados para producir rápidamente sistemas de aplicación. Pero la historia de nunca acabar es que cuando el gerente le pide algo al programador, entonces lo que obtiene es otra cosa.

Al interactuar con el profesional de la computación, el gerente debe decirle que es lo que necesita mecanizar. Si no lo hace, lo que sucede es que el programador tratará de mecanizarlo todo (pues quiere hacer bien su trabajo), o tratará de convertirse en gerente.

El gerente siempre debe recordar que, en realidad ningún sistema puede ser "computarizado". El computador es una herramienta, no su hada madrina. Si la secretaria tiene una máquina de escribir, entonces ella puede producir unas cartas bien hechas, mucho mejores de las que lograría trabajando a mano. Pero es ella, y no su máquina, la que produce. Afirmo que los sistemas computarizados nunca son totalmente automáticos, pues siempre requieren de la intervención del ser humano.

El culpable $[\/]$ $[/\]$

El primerísimo culpable del fracaso de un SIG es el gerente, pues él es responsable de toda la empresa. El gerente no puede delegar en el profesional de cómputo la definición de los Sistemas de Información; más bien debe utilizarlo adecuadamente para que, después de los estudios técnicos adecuados, el SIG producido sea el necesitado. Si un gerente no hace su parte del trabajo, entonces el buen Computólogo tratará de suplirlo y el resultado será diferente del requerido: "Quien no sabe adónde va, llega a otro lado".

Muchas veces los gerentes actúan erróneamente pues se basan en las afirmaciones que el segundo culpable hace. La Universidad es, por supuesto, ese otro culpable. Las carreras de Ciencias de la Computación, Informática, Sistemas de Computación o Ingeniería de Sistemas predican una falsedad: aseguran que sus graduados son capaces de computarizar adecuadamente cualquier empresa; predican que los profesionales de la Computación somos capaces de establecer Sistemas de Información Gerencial. Esta afirmación la hace la Universidad por dos razones: primero, porque confía demasiado en su propia capacidad, y segundo porque desea asegurarle a sus graduados un buen trabajo.

Las Universidades le aseguran a las instituciones y organizaciones que sus graduados "automatizan el proceso de la información". Según las Universidades, todo problema tiene una solución que involucra la computación. Las empresas necesitan creer en la mentira, pues deben sobrevivir en un mundo cada vez más competitivo. Como el recurso más escaso del gerente es su tiempo disponible para trabajar, el gerente cree lo que se le dice, se despreocupa, y al final resultan SDDITs, o sea, sistemas de des-información total.

Esta estratagema de venta de cerebros no es nada original, y le ha servido a todas las Universidades para vender su producto; ninguna Universidad puede confesar que está preparando inadecuadamente a sus graduados. Además, para las Universidades todas las carreras son necesarias: "sin abogados no hay libertad", "sin ingenieros no pueden hacerse casas", "sin médicos no puede haber curación".

Y aunque es muy cierto que la preparación universitaria capacita a muchos profesionales adecuadamente, también es cierto que esta buena formación se da más que todo en las profesiones tradicionales. Pero la Computación es una profesión muy nueva, por lo que todavía la sociedad no ha definido bien qué conocimientos y destrezas implica.

Conozco a dos (jóvenes) profesionales, ambos poseedores del título de Maestría, uno en Computación y otro en Administración, ¡quienes no pudieron definir, juntos, el curso de Sistemas de Información Gerencial! El problema es que ninguno de los dos sabe de lo que el otro está hablando, precisamente porque los Departamentos de Computación de las Universidades no cuentan con profesores para enseñar lo que es un SIG.

Este problema es atribuible a la novedad de al carrera de Computación, que tradicionalmente se ha desarrollado en las Facultades de Matemática o Ingeniería, y muy pocas veces en las de Administración. Muchos profesionales de la Computación no estudian Sistemas de Información Gerencial simplemente porque no hay quien les enseñe. La buena nueva es que este problema es relativamente sencillo de resolver.

La solución $[\/]$ $[/\]$

No creo que sea necesario que los gerentes se hagan expertos en computación para que puedan dirigir adecuadamente un SIG. Basta con que sean buenos gerentes, de forma que los sistemas que impongan a la empresa sean adecuados. Si lo son, la probabilidad de que sean fácilmente mecanizables es muy alta. Todos los casos en que la computarización ha surtido efectos positivos se dan en el contexto de una buena administración.

En cualquier empresa el gerente no tendrá tiempo para discutir todos los detalles de los Sistemas de Información, por lo que debe ser el Computólogo quien cargue con la responsabilidad de entablar clara comunicación entre los dos. Como el gerente no estudiará Computación en la Universidad, es entonces necesario que el profesional de la Computación estudie Administración, de forma que pueda comunicarse con el gerente al implantar el Sistema de Información de una empresa. En caso de duda, el gerente y su programador deberán discutir el diseño del SIG, para lograr que el producto obtenido sea el adecuado.

La Universidad cuenta con dos caminos para resolver este problema de comunicación: el primero es que la Universidad logre que los profesores de las carreras de Administración le impartan cursos a los estudiantes de Computación. Si esto no es posible, entonces es necesario que la Universidad contrate como profesores a Computólogos que desempeñen cargos de administración, para que ellos ayuden a llenar el vacío que hay entre los gerentes y los Computólogos.

La primera solución es la más simple de implementar, aunque tiene el problema de que a veces a un Departamento de la Universidad no le conviene contratar profesores de otras carreras, esto por la estructura universitaria. Sin embargo, la segunda solución tiene el defecto de que muchas veces el Computólogo que ejerce un cargo de administración no cuenta con las bases teóricas requeridas para que su curso sea de altísima calidad. Pero la verdad es que cada vez hay más Bachilleres de la Computación que optan por realizar un posgrado en Administración, y son estas personas quienes con frecuencia solicitan impartir los cursos de Administración para Computólogos.

Sin embargo, como en cualquier carrera de Computación hay cursos que requieren una intensa concentración del estudiante, muchas veces ocurre que los estudiantes de Computación creen que los cursos de Administración son muy fáciles, pues lo que se requiere para ganarlos es "leerse unos articulillos y hacer un proyectito". El resultado de esta actitud es un aprendizaje deficiente, lo que lleva luego a un desempeño profesional también poco adecuado.

En parte esto ocurre porque el administrador requiere de una forma de pensar muy diferente a la del programador o del analista de sistemas: el primero debe saber manejar muy bien variables de tipo social o humano, que son de difícil definición y comprensión, mientras que el segundo trabaja con una máquina, cuadrada y finita, y está educado para que siempre tome en cuenta todos los caminos que llevan a la solución. Los Computólogos somos formados básicamente como programadores, pues en la mayoría de los cursos formativos de computación es necesario escribir programas, y los programas que no toman en cuenta todas las posibilidades son incorrectos. Además, las carrera de Computación muchas veces enfatizan más lo aspectos teóricos de la computación que sus aplicaciones administrativas.

Para arreglar este problema de aprendizaje se necesitan dos cosas: la primera es que los profesores tomen conciencia del problema, lo que trato de lograr al publicar este escrito. La segunda es que los profesores motiven adecuadamente a sus estudiantes, y les hagan ver que la Administración no es una disciplina de "articulillos y un proyectito", para que les convenzan de la necesidad que tiene cada Computólogo de entablar una comunicación adecuada con su gerente.

No afirmo que los Computólogos somos "cuadrados y finitos"; sólo afirmo que somo más "cuadrados y finitos" que los administradores...

Curricula universitaria actual $[\/]$ $[/\]$

Casi todas las Universidades han entendido que deben preparar adecuadamente a sus graduados en Computación para que puedan hablar con los gerentes. Por ejemplo, la Universidad de Costa Rica ya cuenta con varios cursos de Administración y Auditoría, los que imparte a nivel de Licenciatura. En la carrera de Computación del Instituto Tecnológico de Costa Rica se imparten varios cursos de Administración en el bachillerato, lo que también sucede en todos los Colegios de la Universidad Autónoma de Centro América.

La carrera de Sistemas de Computación de la UACA incorpora los conocimientos técnicos requeridos para la construcción de programas, y los de administración necesarias para diseñar adecuadamente Sistemas de Información Gerencial. Aunque la carrera del Instituto Tecnológico tiene un poco esta inspiración, se inclina más a ser como la de la Universidad de Costa Rica, en que se enfatizan más lo aspectos teóricos de la computación que sus aplicaciones administrativas.

Esta diversidad de carreras en nuestro país es muy beneficiosa, aunque en mi opinión serán los graduados de la UACA quienes encuentren una mayor aceptación del mercado.

Conclusión $[\/]$ $[/\]$

Un gerente no debe tratar de resolver sus problemas institucionales simplemente comprando equipo de cómputo, pues aunque pueda que de esa manera impresione a sus accionistas, si él no hace bien su labor gerencial no habrá computador que le saque del embrollo. Espero que los gerentes comprendan que su papel es fundamental al computarizar, y que no pueden delegar su responsabilidad. Un buen gerente es necesario para un buen SIG.

Por su parte, el Computólogo debe evitar suplantar al gerente; su actitud debe ser la de servir a los mandos superiores de la empresa, pues son éstos los que deben dirigirla.

Le corresponde a la Universidad formar adecuadamente al Computólogo, para que pueda comunicarse con su gerente.

Es alentador saber que la solución que propongo ya está siendo implementada por nuestras Universidades en la forma de cambios curriculares. Sin embargo, es necesario que en los cursos de Administración para Computólogos el profesor convenza al estudiante de la necesidad imperiosa que tienen de aprender, para así asegurar un desempeño profesional adecuado.

Notas de pie de página $[\/]$ $[/\]$

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Oración inaugural para incorporarse como Maestro de Número en el Stvdivm Generale Costarricence, 27/VIII/1990.

Bibliografía $[\/]$ $[/\]$

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[Van-87]	Van Gigch, John P.: Teoría General de Sistemas, 2ed, Trillas, 1987.

Indice $[\/]$ $[/\]$

[-]	Resumen
[-]	Introducción
[-]	Sistemas de Información Gerencial
[-]	El síntoma
[-]	El problema
[-]	El culpable
[-]	La solución
[-]	Curricula universitaria actual
[-]	Conclusión

	Notas de pie de página
	Bibliografía
	Indice
	Acerca del autor
	Acerca de este documento
$[/\]$	Principio Indice $[\/]$ Final

Acerca del autor $[\/]$ $[/\]$

Adolfo Di Mare: Investigador costarricense en la Escuela de Ciencias de la Computación e Informática [ECCI] de la Universidad de Costa Rica [UCR], en donde ostenta el rango de Profesor Asociado. Dirige la Cátedra de Programación y es el presidente del Consejo de Area de Ingeniería de Sistemas. Trabaja en las tecnologías de Programación. Es Maestro Tutor del Stvdivm Generale de la Universidad Autónoma de Centro América [UACA], en donde ostenta el rango de Catedrático y funge como Consiliario Académico. Obtuvo la Licenciatura en la Universidad de Costa Rica y la Maestría en Ciencias en la Universidad de California, Los Angeles [UCLA].

[mailto] Adolfo Di Mare <adolfo@di-mare.com>

Acerca de este documento $[\/]$ $[/\]$

Referencia:	Di Mare, Adolfo: No usemos computadores, Revista Acta Académica, Universidad Autónoma de Centro América, Número 7, pp [29-31], ISSN 1017-7507, Octubre 1990.
Internet:	`http://www.di-mare.com/adolfo/p/nousecom.htm http://www.uaca.ac.cr/actas/1990oct/nousecom.htm`
Autor:	Adolfo Di Mare `<adolfo@di-mare.com>`
Contacto:	Apdo 4249-1000, San José Costa Rica Tel: (506) 207-4020 Fax: (506) 438-0139
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